Gastronomía
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H ay veces que se prefiere comer rápido y ligero, evitando
el encorsetamiento de los
elegantes restaurantes de
negocios. Se busca lo informal,
donde no se pierde tiempo, pero sin olvidar
la calidad. Hemos seleccionado cuatro
restaurantes de cuidado diseño, lugares
ideales para que el viajero apresurado
comparta mesa y ultime detalles con sus
clientes antes de partir. Los precios son
muchos más asequibles que los restaurantes
tradicionales y la calidad está garantizada.
BARCELONA
Delibar
Con sólo seis meses abierto ya ha llamado
la atención del público y ha cautivado una
buena cuota de ejecutivos de alma joven, que
busca comer bien, rápido y en un ambiente
muy cool, muy Barcelona. Se trata de un
lugar muy dinámico, que cambia de cara en
función de la hora del día. Por la mañana,
buenos desayunos, (cafés, infusiones,
zumos, frutas, pastas y bocadillos) leyendo la
prensa diaria, los informativos de televisión
o conectados al Wi-Fi para empezar
informados el día. A media mañana se
puede tomar un cóctel acompañando un
aperitivo mientras se hace tiempo para
comer. Cantan de viva voz la carta y siempre
hay una alternativa de ensalada y verdura
cocida, sin olvidar, claro está, los pescados,
la pasta, legumbres y carne. Una cocina
de muy buen producto, sin perder de vista
la dieta equilibrada. Por la noche, la carta
propone foies, quesos o embutidos de
diferentes denominaciones de origen, o una
variedad de carpaccios y ahumados. Para
rematar, carne o pescado a la plancha, sano y
saludable. Todo esto ambientado con música
chill out, en una atmósfera cosmopolita,
con un mapa en vinilo de Barcelona en la
puerta y lámparas interiores con forma de la
cuadrícula típica de este distrito barcelonés.
Al fondo, una gran fotografía que trasporta a
los Campos Elíseos de París. Excelente carta
de vinos y cavas por copas.
Ensaladas o cremas, de 7 a 8 euros. Platos
principales, de 12 a 14 euros. Casanova,
182, Baixos 1. T. 934 19 76 16.
Inopia
Bajo la firma de Albert Adrià y ligado a
ese sentimiento tan catalán d´anar a fer
el vermut, nació este singular bar que
ofrece tapas clásicas de calidad. Decorado
Cuatro mesas informales
COMIDA RÁPIDA
DE LUJO
El concepto de fast food en la gastronomía ha encontrado un nuevo formato caracterizado
por preparaciones ligeras y sencillas sin renunciar al toque gourmet. / por Mariana Jara
al estilo años setenta, se puede disfrutar
de un ambiente informal que recupera el
concepto de bar de barrio, pero moderno,
con excelentes productos para picar. Los
platos estrellas son todo tipo de conservas,
como el mundo de la anchoa en variadas
presentaciones, los boquerones en vinagre,
las patatas bravas con salsa mixta, la
ensaladilla rusa, las croquetas, los callos y
siempre un pincho del día. La cerveza de la
casa, Moritz, es una buena alternativa para
acompañar unos deliciosos berberechos
en la barra de fuera o en la de dentro,
aunque la carta de jereces es muy amplia
y tentadora, al igual que el apartado de
aceitunas, para todos los gustos: arbequinas,
malagueñas ajadas, manzanilla aliñadas,
mezcla de Inopia… Como era de esperar
al pertenecer al pastelero de la familia
Adrià, los postres son muy novedosos,
como las fresas con caramelo de vinagre
Chardonnay, el helado de café de Colombia,
el catalanísimo queso Mató de drap con
miel de romero y la especialidad, el flan de
huevo de la casa. Todos los camareros van
vestidos de Hugo Boss y es un lugar perfecto
para olvidar las tensiones del día y disfrutar
de una cena o pica pica informal, pero de
muy buena calidad.
Especialidades, de 3 a 12 euros. Fritos, de
1,80 a 6 euros. Tamarit, 104.
T. 934 24 52 31.
MADRID
Paninoteca D'E
El polémico y multifacético chef Sergi
Arola abrió en 2004 una novedosa oferta
gastronómica. Se trataba de un lugar
moderno, de diseño, donde comer paninos
al más puro estilo italiano, pero adaptados
a los gustos españoles, como uno de
torta del Casar con espinacas frescas,
aceite de trufa, o los mediterráneos, como
mejillones en escabeche, tomate, mahonesa,
lechuga trocadero y pan. Por último, los
tradicional, cuyo relleno son los buenos
quesos, embutidos, salazones y ahumados.
Además de cocapizzas, ensaladas, frescas
y originales, muy bien presentadas, y las
tradicionales raciones. Todo ello regado
con una extensa carta de vinos y buenas
copas. Tan buena acogida ha tenido de
público, que ya van por el cuarto local, tres
en Madrid y uno que abrirá este mes en
Barcelona. El concepto es claro: fast food de
lujo, de buen nivel de producto, mesitas
pequeñas o barra, una atención rápida e
informal y un entorno de diseño. Para los
gourmets que quieren comer rápido.
Paninos, de 3 a 9 euros. Ensaladas, de 9 a
12 euros. Velázquez, 32.
T. 914 26 38 16.
Cubik
En pleno corazón de Madrid, cerca de la
puerta del Sol, abrió en octubre como una
alternativa informal para ejecutivos de la
zona. Con un decorado popero, lleno de
colorido, ofrece una cocina de tendencia, al
alcance de todos los bolsillos. Platos como
sashimi de salmón con vinagreta al cabernet
sauvignon y leche de coco; ensalada de
espinacas con trigo tierno y papaya o
coca de langostinos con fondue de queso,
entre los entrantes; lasaña crujiente con
solomillo de buey al cabrales; risotto Cubik
con carabineros y trompeta de la muerte o
brochetas de bambú con chipirones en su
tinta, son algunos de los platos principales.
Servicio desenfadado, mesitas pequeñas,
salvamanteles de papel y sillas rojas son
parte del decorado de este local, que por el
mediodía ofrece un menú a 10 euros con
sanas y sabrosas alternativas.
Entrantes, de 4 a 6 euros. Segundos, de 7 a
12 euros. Aduana, 12.
T. 915 23 04 81.
Son restaurantes de diseño cuidado,
comida exquisita y ligera, y precios más
económicos que los tradicionales
La Paninoteca D'E, en Madrid
Cubik, en Madrid
Restaurante Deli,
en Barcelona
Restaurante Inopia,
en Barcelona
el encorsetamiento de los
elegantes restaurantes de
negocios. Se busca lo informal,
donde no se pierde tiempo, pero sin olvidar
la calidad. Hemos seleccionado cuatro
restaurantes de cuidado diseño, lugares
ideales para que el viajero apresurado
comparta mesa y ultime detalles con sus
clientes antes de partir. Los precios son
muchos más asequibles que los restaurantes
tradicionales y la calidad está garantizada.
BARCELONA
Delibar
Con sólo seis meses abierto ya ha llamado
la atención del público y ha cautivado una
buena cuota de ejecutivos de alma joven, que
busca comer bien, rápido y en un ambiente
muy cool, muy Barcelona. Se trata de un
lugar muy dinámico, que cambia de cara en
función de la hora del día. Por la mañana,
buenos desayunos, (cafés, infusiones,
zumos, frutas, pastas y bocadillos) leyendo la
prensa diaria, los informativos de televisión
o conectados al Wi-Fi para empezar
informados el día. A media mañana se
puede tomar un cóctel acompañando un
aperitivo mientras se hace tiempo para
comer. Cantan de viva voz la carta y siempre
hay una alternativa de ensalada y verdura
cocida, sin olvidar, claro está, los pescados,
la pasta, legumbres y carne. Una cocina
de muy buen producto, sin perder de vista
la dieta equilibrada. Por la noche, la carta
propone foies, quesos o embutidos de
diferentes denominaciones de origen, o una
variedad de carpaccios y ahumados. Para
rematar, carne o pescado a la plancha, sano y
saludable. Todo esto ambientado con música
chill out, en una atmósfera cosmopolita,
con un mapa en vinilo de Barcelona en la
puerta y lámparas interiores con forma de la
cuadrícula típica de este distrito barcelonés.
Al fondo, una gran fotografía que trasporta a
los Campos Elíseos de París. Excelente carta
de vinos y cavas por copas.
Ensaladas o cremas, de 7 a 8 euros. Platos
principales, de 12 a 14 euros. Casanova,
182, Baixos 1. T. 934 19 76 16.
Inopia
Bajo la firma de Albert Adrià y ligado a
ese sentimiento tan catalán d´anar a fer
el vermut, nació este singular bar que
ofrece tapas clásicas de calidad. Decorado
Cuatro mesas informales
COMIDA RÁPIDA
DE LUJO
El concepto de fast food en la gastronomía ha encontrado un nuevo formato caracterizado
por preparaciones ligeras y sencillas sin renunciar al toque gourmet. / por Mariana Jara
al estilo años setenta, se puede disfrutar
de un ambiente informal que recupera el
concepto de bar de barrio, pero moderno,
con excelentes productos para picar. Los
platos estrellas son todo tipo de conservas,
como el mundo de la anchoa en variadas
presentaciones, los boquerones en vinagre,
las patatas bravas con salsa mixta, la
ensaladilla rusa, las croquetas, los callos y
siempre un pincho del día. La cerveza de la
casa, Moritz, es una buena alternativa para
acompañar unos deliciosos berberechos
en la barra de fuera o en la de dentro,
aunque la carta de jereces es muy amplia
y tentadora, al igual que el apartado de
aceitunas, para todos los gustos: arbequinas,
malagueñas ajadas, manzanilla aliñadas,
mezcla de Inopia… Como era de esperar
al pertenecer al pastelero de la familia
Adrià, los postres son muy novedosos,
como las fresas con caramelo de vinagre
Chardonnay, el helado de café de Colombia,
el catalanísimo queso Mató de drap con
miel de romero y la especialidad, el flan de
huevo de la casa. Todos los camareros van
vestidos de Hugo Boss y es un lugar perfecto
para olvidar las tensiones del día y disfrutar
de una cena o pica pica informal, pero de
muy buena calidad.
Especialidades, de 3 a 12 euros. Fritos, de
1,80 a 6 euros. Tamarit, 104.
T. 934 24 52 31.
MADRID
Paninoteca D'E
El polémico y multifacético chef Sergi
Arola abrió en 2004 una novedosa oferta
gastronómica. Se trataba de un lugar
moderno, de diseño, donde comer paninos
al más puro estilo italiano, pero adaptados
a los gustos españoles, como uno de
torta del Casar con espinacas frescas,
aceite de trufa, o los mediterráneos, como
mejillones en escabeche, tomate, mahonesa,
lechuga trocadero y pan. Por último, los
tradicional, cuyo relleno son los buenos
quesos, embutidos, salazones y ahumados.
Además de cocapizzas, ensaladas, frescas
y originales, muy bien presentadas, y las
tradicionales raciones. Todo ello regado
con una extensa carta de vinos y buenas
copas. Tan buena acogida ha tenido de
público, que ya van por el cuarto local, tres
en Madrid y uno que abrirá este mes en
Barcelona. El concepto es claro: fast food de
lujo, de buen nivel de producto, mesitas
pequeñas o barra, una atención rápida e
informal y un entorno de diseño. Para los
gourmets que quieren comer rápido.
Paninos, de 3 a 9 euros. Ensaladas, de 9 a
12 euros. Velázquez, 32.
T. 914 26 38 16.
Cubik
En pleno corazón de Madrid, cerca de la
puerta del Sol, abrió en octubre como una
alternativa informal para ejecutivos de la
zona. Con un decorado popero, lleno de
colorido, ofrece una cocina de tendencia, al
alcance de todos los bolsillos. Platos como
sashimi de salmón con vinagreta al cabernet
sauvignon y leche de coco; ensalada de
espinacas con trigo tierno y papaya o
coca de langostinos con fondue de queso,
entre los entrantes; lasaña crujiente con
solomillo de buey al cabrales; risotto Cubik
con carabineros y trompeta de la muerte o
brochetas de bambú con chipirones en su
tinta, son algunos de los platos principales.
Servicio desenfadado, mesitas pequeñas,
salvamanteles de papel y sillas rojas son
parte del decorado de este local, que por el
mediodía ofrece un menú a 10 euros con
sanas y sabrosas alternativas.
Entrantes, de 4 a 6 euros. Segundos, de 7 a
12 euros. Aduana, 12.
T. 915 23 04 81.
Son restaurantes de diseño cuidado,
comida exquisita y ligera, y precios más
económicos que los tradicionales
La Paninoteca D'E, en Madrid
Cubik, en Madrid
Restaurante Deli,
en Barcelona
Restaurante Inopia,
